Mucho se ha debatido últimamente sobre las elecciones primarias de la MUD. Algunos estados no tuvieron la oportunidad de pre-elegir a sus representantes en la próxima Asamblea Nacional, espacio crítico a pugnarse el 6 de Diciembre. La directiva de la tolda opositora anunció entonces un método de elección de candidatos: consenso y primarias. Para las regiones que "se sabe de un liderazgo firme, sin discusión" ahí les va el consenso. Una cuota de poder repartida a dedo, a la vieja usanza de AD y COPEI. Obviamente a una población un poco, sólo un poco, más madura políticamente esto no sentó nada bien, se vió como un retroceso.
Una vez difundida la maqueta electoral se asoman algunos argumentos como banderas para, no conforme con que sea una designación muy poco democrática, por decir lo menos, y con lo que bastaría para hacer las tan aclamadas primarias, buscar la forma de hacer elecciones internas de candidatos. Me refiero a la regionalización, sentido de pertenencia terrenal y local.
El candidato no es oriundo del lugar al cual está dedocráticamente asignado, no ha vivido nunca allí, no lo conoce nadie de por allá. Esto ha generado un escándalo de gran magnitud.
A continuación cito el cuadro de finalistas de la edición Miss Venezuela 2014, entre paréntesis el lugar de nacimiento de las reinas de belleza:
Lorena Santos 1ra finalista Dtto Capital (Vargas)
Mayra Rodriguez Miss Earth Amazonas (Aragua)
Edymar Martinez Miss International Anzoategui (Anzoategui)
Mariana Jimenez Miss Venezuela Guarico (La Guaira)
Nótese que de cuatro, una sola candidata es nacida en el mismo estado al cual representó.
El round robin es sin duda momento para despertar cualquier tipo de pasiones en este país de beisbol caribe. Rivalidades a máxima potencia, cánticos en los estadios: "EEEEEELIMINADOS ". Todo el mundo tiene una opinión y un equipo que lo representa, si bien no están repartidos equitativamente la cantidad de franquicias, pocos pueden negar que en los cuatro puntos cardinales cada persona alienta a una novena. Magallanes tiene fama de tener en su tripulación a varios fanáticos que naufragaban a falta de equipo en su propio estado.
Terminado el último juego de la final, ahora todos somos Venezuela. De esa manera nos intentan vender el hecho de que los que nos representarán en la serie del Caribe merecen nuestro respaldo a pesar de que son parches de un traje que a última hora se confecciona, un frankestein de lo "disponible". Muchos nos sentimos por momentos estafados, dolidos de nuestra identidad al tener que aupar a quien hace tres días deseábamos que se ponchara a swing completo. Cambio de uniforme y todo arreglado.
Esto ha sido así al menos desde que tengo uso de razón, y me pregunto: ¿Por qué le pedimos entonces a la directiva que haga lo contrario? ¿Por qué esperamos que se respeten las localías si hay precedentes de cerrar filas en pro del fin mayor: Miss Universo, Campeón del Caribe?
Es verdad que los hechos que aquí presento tienen por toda índole mucha diferencia de fondo. Pero en el imaginario colectivo pocas cosas como el concurso de belleza y el beisbol para referirnos a la identidad Venezolana, de alguna manera son nuestras únicas instituciones que hasta ahora seguramente tendrían mejor respaldo en las encuestas.
El hecho no es el escándalo por querer defender cada quién a su región, es convencer para unificar a la nación.
Esta tarea se la dejo a los políticos. Al resto nos queda revisarnos y descubrir si realmente nos parece tan insólito que nos hagan ese tipo de propuestas cuando, al parecer, siempre ha sido así.
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