sábado, 28 de marzo de 2015

Atentamente

Volando llegué al cielo
En busca de regalos para ti
La luna me sirvió de silla
Me senté a pescar estrellas
Las guardé en una nube
Y con un rayo de sol te las voy entregando
Mientras bajamos contentos por el arco iris.

E

Sí, y empieza en positivo
Que brilla como distintivo
Altivo y subversivo
Ojos abiertos y chispeantes
Expectantes con vida desbordantes
Alucinante en energía fascinante
Vivir es lo más importante
Como el viento chocante
Con dedos inquietantes
Saborea el instante
La paz es constante
Ni el verde incesante
Interesante visión crocante
Es hora de que el corazón cante !

Percepción

¿De qué color será la conciencia?
Blanca tal vez, como presencia vacía
¿Será del tamaño de la voluntad de quien la posea?
Conciencia
Conciencia de sí mismo y de los demás
Como el diminuto insecto que rompe el silencio
Sí, el silencio lo acompaña y te invita
A que tu conciencia lo sienta.

Memoria

Me pregunto que habrá sido de ti
Sigo recordando cómo el humo jugaba
En el jardín de tu taza
Casi puedo sentir ese amargo sabor
Que se burla de mí al entrar en tu boca
Calientes estaban tus dedos
Mientras los míos te dibujan en el aire
Tan simple como un sorbo
Quisiera ser simple como un grano de café.

Pincel

Contempla el verde a tu alrededor
En la cima del árbol de atrás
La perspectiva luce naranja
Y te arropa el azul claro

Los colores te llenan de vida
Hacia abajo el marrón oscuro
Y tu... pensando en el futuro

Cuando el arco iris se vea diferente
Y el violeta aparezca junto a ti

Piensa en presente
Hay amarillo latente
Como el sol caliente
Te sientes bien

Es un día cualquiera
Una paleta de colores!!!

Orbita

Emociones reducidas a expresion atomica
Amor nuclear y radioactivo
Esporas de nostalgia insuflan mis suspiros
Conteo regresivo.

jueves, 19 de marzo de 2015

YO NO QUIERO PETROLEO

31 de Julio de 1914 es la fecha oficial del reventón del primer yacimiento petrolero venezolano Zumaque 1 y que curioso que se utilice la palabra "reventón" ya que también tiene connotación de fiesta, parranda o jolgorio en el argot urbano moderno. Comenzó la fiesta y la entrada es gratis, todos están invitados y hasta se les asegura la respectiva torta para los familiares y amigos que no pudieron asistir; incluso tienen pastel asegurado por generaciones enteras, entonces ¿ que es lo que queda por hacer? Bailar al ritmo que suene y olvidarse del resto ya que zumaque 1 nos ha hecho acreedores de la torta mas rica y duradera del mundo.

El dueño de la fiesta era en ese momento Juan Vicente Gomez que para aquel entonces no tenía idea de cuan grande, ruidosa y envidiada sería la emanación natural. Aquel caudillo hizo lo que muchos consideran lo más prudente que fue otorgar el permiso para que subieran el volumen y esperar las regalías por su concesión, era una Venezuela totalmente rural y con poca comprensión de los avances tecnológicos de la época y menos aún de la necesidad de energía que el mundo demandaba, era una Venezuela "a caballo" ,como lo dice Manuel Caballero, que estaba en ese momento surtiendo a un mundo industrializo, un mundo "Hidráulico", se ignoraba en ese entonces como cuando la llegada de Colón y sus amigos el valor real de lo natural y a cambio de espejitos y buenos tratos al principio se accedió a entregarlo todo.

Solemos recordar quienes a bailes y celebraciones hemos asistido que a la mañana siguiente solo queda un horrible dolor de cabeza y en ocasiones de conciencia, pues esta fiesta no iba a ser la excepción aunque de las conciencias no estamos seguros si se adolecen. A lo largo de la historia se han visto los síntomas de esta resaca o "cruda" como se le llama en otros países, el crudo se ha malgastado a diestra y siniestra, ha servido para llenar bolsillos de gobernantes, familias selectas y clientes. Es que no se tiene medida ni sentido de la administración de tal riqueza por la sencilla razón de que no es nuestra.

No nos pertenece algo que no trabajamos por obtener y sin embargo nos obsesionamos por gastar. El dueño de su propio negocio sabe de lo que hablo. Quien se esfuerza por algo lo cuida y administra porque lo sabe suyo, y no quiero desestimar a las refinerías, procesos de distribución e industria que ciertamente representan una cuota de sudor en el explotación de petróleo en el país, pero el fondo del modelo es que NO es nuestro, nosotros no lo inventamos. En los últimos meses se ha visto una de las peores consecuencias de la mala administración de este recurso o "maldición negra", nos quedamos una vez más con las ganas de aprovechar un alza en los precios para lograr lo que ahora parece un imposible: diversificar la economía. Inventar nosotros mismos, producir lo que necesitamos es ahora la misión a cumplir porque sencillamente no nos queda de otra. Existen algunas publicaciones donde se preguntan por qué en países con menos recursos naturales que el nuestro, hay un mayor desarrollo económico, sencillamente ellos no tuvieron alternativa, era crear o morir nadie les vino a regalar nada.

Lo descrito anteriormente es lo que día a día publican periódicos o noticieros, un llamado a la reflexión sobre lo que un país debería tener como prioridad, en lugar de ver como repartir una torta procurar revisar su alacena y elaborar los ingredientes necesarios para realizar cualquier cantidad de pastelería que satisfaga mayor cantidad de gustos. Ello necesita obviamente entrenamiento, Educación. " Hemos hecho repúblicas pero no hemos hecho aún lo más importante, Republicanos" palabras de Rodríguez durante su épica cruzada por la instrucción de los ciudadanos para que tengan las herramientas necesarias para construir un país. Por estas razones señores lectores, yo no quiero petróleo.


domingo, 15 de marzo de 2015

Lavando la Bandera

Son las 10am en la casa de mi madre,  yo voy pasando por la cocina y de repente la observo en el lavamanos del  baño haciendo unos movimientos poco usuales dada mi experiencia de convivencia con ella. Debí tener una cara de asombro poco común ya que no hizo falta preguntarle nada para que ella misma inmediatamente diera respuesta a mis pensamientos:” Estoy lavando la bandera, no se si eso se hace pero yo la estoy lavando”.

  No puede uno escuchar esa frase sin contextualizarlo todo,¿ que significa realmente lavar la bandera?,¿ es eso posible?,¿ eso se hace?. En el  tema literario, para mi lavar la bandera seria como pulir el amarillo, que resplandezca todo su brillo y se junte con un azul más limpio, sereno, callado y que de pie a que aparezca  el contraste, el llamativo y dramático rojo.  Los símbolos de la patria sometidos a revisión,  gracias al amor de sus ciudadanos que al verlos maltratados deciden sin tener certeza de que se hiciera correctamente tomarlos en sus manos y devolverles un poco de dignidad.


 Al vivir en esta sociedad donde constantemente se hacen observaciones sobre la falta de valores, la perdida de la moral y buenas costumbres uno debería pensar que rescatar todas las cosas que nos hacen ciudadanos debiera  ser imperioso para todos, una regla, una necesidad.  Lavar la bandera  va mas allá que echarle agua y jabón  a una porción de tela, es un acto de amor, implica acción y por ende pensamiento. Es hacer lo correcto,  cumplir con las leyes,  ser honesto, honrar a los mayores, respetar los derechos de todos, rescatar las instituciones,  dar los buenos días, no botar basura, ayudar a los demás. Tenemos que lograr que el agua nos sirva para que con ella se vaya toda mancha, abuso y violación de nuestro símbolo. Basta de que se utilicen con falsas intenciones, hora de sentirlos y demostrarlo con acciones, es hora de que todos lavemos a nuestra amada bandera.

domingo, 8 de marzo de 2015

Vaciando Gavetas

Domingo 10:14am, entre ver fútbol y desayunar con jugo de naranja surge la imperativa tarea de ordenar el dormitorio incluyendo las temidas gavetas. No soy la única persona en posponer la actividad de revivir recuerdos, algunos, siguen hasta hoy como dijo Cerati. Todo parecía pan comido, era solamente abrir, ver, botar y cerrar; cuan ingenuo podemos ser, que tendrá lo que llaman nostalgia que nos hace prisioneros de una imagen que lleva a un momento, a una canción a un dolor, a un amor. 

Comprendí que era necesario hacer una revisión de mis gavetas y así también me despojaba de lo que ya no tenía sentido guardar, comprendí que el afán de algunas personas de no acumular ningún recibo, nota, tarjeta o foto también puede ser una necesidad de no aferrarse a nada, de sentirse "limpios". Nuestro corazón difícilmente está limpio, por el solo hecho de vivir e interactuar con otros corazones, parte de nuestra experiencia en este plano físico es el de, precisamente, llenar el alma con la de otros, con experiencia propia y compartida que nos da algún sentido. Aquella alma impoluta de dolores y alegrías sería producto de un cínico orfebre. 

Sigo entre comentarios del partido y canciones que súbitamente estallan en su coro más pegajoso, los sentimientos se van clasificando y la lógica toma un pequeño papel en este relato. Polvo en los dedos y papel roído se juntan para recordarme que he vivido muchos ciclos, graduaciones y  fiestas. Momento de reflexionar y tal vez volver a guardar algunas cosas pero ahora atento a lo que mañana se me pueda presentar, no todo es acumulable.

Hasta que la muerte nos separe o se acabe la bateria

Conecte el cargador y batería baja son los anuncios mas temidos para la mayoría de los usuarios de teléfonos celulares de hoy en día, incluso algunos experimentan cambios fisiológicos palpables a pocos segundos de leer aquella frase en la pantalla de su aparato. Y es que la necesidad de estar conectados en todo momento se ha vuelto imprescindible, a tal punto que ya tenemos cargadores móviles de estos artefactos, si, tenemos que estar conectados siempre, disponibles, en línea, y esto al mismo tiempo juega un papel vital en la dinámica de las parejas en estos tiempos del tweet y Facebook.
Hace poco mas de  una década todavía era común observar a jóvenes en los teléfonos públicos conversando con las muchachas quienes al otro lado de la línea tenían que disimular palabras, respuestas y gestos para tratar de sortear luego preguntas incómodas de sus padres, esto principalmente porque el teléfono de la casa estaba en la sala salvo por uno que otro inalámbrico que invitaba a las charlas mas privadas. Por su parte, el galán debía estar preparado para las inquisiciones de la persona que contestaba el teléfono :”Buenas tardes, por favor con Luisa” “De parte de quién?”, invito a pensar al lector hace cuánto tiempo no pronuncia las citadas frases.
El proceso de cortejo siempre ha tenido el mismo fin, sin embargo, con la revolución tecnológica  celular se pensó que ahora sería mas fácil. Llegó primero el mensaje de texto el cual te daba una excusa perfecta “no había leído el mensaje” con lo cual se justificaba el tiempo transcurrido entre la hora de envío y respuesta, aquél tiempo por lo general era usado por la otra persona para pensar mas fríamente aquella respuesta, colocarle todos los detalles y ajustes necesarios, ya no era falta la rapidez mental que requiere llevar una conversación en tiempo real, ahora solo puedes abreviar palabras y enviar “caritas”, ya todo es más conectado, más distante, más portátil, más inmediato. En antaño ya se encuentran las nobles cartas entre enamorados, cada sobre simbolizaba esperanza, paciencia y cuidado además del toque personal que significaba la caligrafía y hasta ortografía del remitente, fue época mas tranquila y verdadera.

Nos enganchamos con la promesa del 24/7 todo el año, la persona que quieres va a estar allí, al responder un mensaje, comentar una foto y hacerte un mention. Dar las buenas noches en el momento exacto en el que Zeus se hace presente, todo eso suena muy apetecible, muy seguro. ¿Necesitamos tener las certeza en todo momento de que la media naranja debe estar disponible?, ¿ Es nuestro afán de estar  conectados con la otra persona a través del teléfono un síntoma de que no estamos verdaderamente conectados con nosotros mismos?  En otros tiempos las parejas tenían encuentros en las plazas, cafés, en el comedor de la casa o el cafetín del colegio, invito a que los pongamos en práctica y veamos a los ojos a aquella persona con la cual decidimos pasar nuestros días, seguramente desarrollaremos un sentimiento más real y humano que el que tenemos hacia el aparato al cual nos hemos vuelto, en parte, esclavos de su señal y batería.